Vilă detașată de vânzare în Zona de Mascarat , Altea

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Disfrute de una elegante villa con impresionantes vistas al mar, situada en un enclave privilegiado de la Costa Blanca. Este hogar de lujo se localiza en una de las zonas residenciales más exclusivas y pintorescas, caracterizada por su belleza natural y su excelente acceso a una amplia gama de servicios, que incluyen comercios, restaurantes, un campo de golf y un vibrante puerto deportivo.

La villa se eleva en cuatro niveles perfectamente distribuidos. En la planta principal, hallamos un acogedor dormitorio con baño en suite, además de una moderna cocina americana completamente equipada, un trastero y un baño adicional. También se encuentran un comedor y un luminoso salón, ambos orientados hacia el mar, con acceso al jardín y a la zona de la piscina. La zona exterior destaca por varias terrazas cubiertas ideales para relajarse, junto a una espectacular piscina infinita y una para los más pequeños. Un espacio adicional incluye una terraza de madera con una cocina al aire libre y un extenso jardín que complementa la oferta de este hogar excepcional.

En la primera planta, se ubica el dormitorio principal, que goza de un vestidor y un baño privado con bañera y vistas al mar. En este mismo nivel, hay tres dormitorios más, dos baños adicionales y un impresionante balcón de 60 m² que se puede acceder desde la sala familiar. Además, se encuentra otro amplio balcón que acompaña a los dormitorios, ofreciendo un espacio ideal para disfrutar del paisaje que rodea la vivienda.

En la primera planta bajo rasante, encontramos un generoso garaje con un punto de carga eléctrica, trastero, baño y zona de lavandería. La segunda planta bajo rasante se dedica al ocio, albergando una sala de juegos, otro baño, sauna y una terraza orientada al sur con cocina exterior, perfecta para disfrutar de agradables días al aire libre.

La ubicación de esta villa es inmejorable, al estar cerca de un prestigioso campo de golf y a solo cinco minutos en coche de los encantos del pueblo cercano. Esta localidad es conocida por su belleza y se le reconoce oficialmente como Capital Cultural de la Comunidad Valenciana. Con más de 8 kilómetros de costa que alternan acantilados y pequeñas calas junto a extensos tramos de playa, este destino ofrece tanto la serenidad del mar como la majestuosidad de la montaña. Los aeropuertos más cercanos se encuentran a 50 minutos y 1,5 horas en coche, facilitando el acceso a esta escapada de ensueño. Justo bajo la urbanización, un puerto marítimo le dará la oportunidad de disfrutar de una variedad de deportes acuáticos, buceo y una selección de restaurantes y bares.